Comedia Multimedia, aquí y ahora
El mundo de la tecnología, de lo virtual, de lo conectado y desconectado, del móvil, las redes sociales, la multipantalla, el cibersexo, la ciberamistad,… el mundo multimedia. Un retrato de lo que somos y de en lo que nos hemos convertido. Comedia Multimedia, diseñada por Álvaro Tato y dirigida por Yayo Cáceres, consigue que, por más de una hora, nos olvidemos de nuestros teléfonos móviles y lo que es mejor, que al salir de la función den ganas de tirar el móvil a la primera papelera. Pero no lo hacemos, no nos atrevemos, por eso Comedia Multimedia funciona, porque es real, todos nos sentimos identificados con su discurso y, aunque nos cueste mirarnos al ombligo, nos hemos convertido en eso que tanto criticamos.
Miss Web nos va a presentar el producto de entretenimiento definitivo. Le acompañan tres ayudantes, quizá tres hologramas, o quizá no. Bit, Click y Link. Juntos harán que nos interesemos por su producto, que tengamos ganas de conocerlo y queramos saber más de él. No será hasta el final, cuando descubramos la realidad de todo. El aquí y ahora, lo efímero, lo que vive hoy y desaparece luego. ¿Lo compramos?
Comedia Multimedia triunfa desde el comienzo. Buen arranque. Un número musical, sin adornos ni filigranas, en el que los verdaderos protagonistas son la música, las letras de Tato y las voces. Las voces de cuatro intérpretes que derrochan la energía necesaria sobre el escenario. Un auténtico placer verlos, y escucharlos, en escena. El planteamiento es sencillo. Nos encontramos casi en una de esas excursiones del Imserso en las que el único objetivo es venderles un “fantástico” colchón o una almohada de última generación. La única diferencia, el público derrocha juventud y la función también. Reclamados por la más avanzada tecnología, el montaje te atrapa, te conquista y te dispara directo a la razón, esa razón que hace que te des cuenta de que, desgraciadamente, estamos más pendientes a nuestra pantalla del móvil que a lo que sucede a nuestro alrededor. Canciones y ritmos acertados, relájate y consume.
Álvaro Tato y Yayo Cáceres consiguen darle una buena continuidad a un texto que a veces pierde el hilo conductor de la historia. Tranquilos, lo recupera pronto y con fuerza. Hasta un final que es como un tortazo en la cara del espectador, una vuelta a la realidad. Cáceres aprovecha las cualidades de los cuatro intérpretes que tiene en escena, dejándoles a cada uno su espacio de lucimiento. La reina del teatro, Inma Cuevas, aprovecha cada papel que se le otorga y en Comedia Multimedia nos sorprende con su voz cantada y con lo bien que se lo pasa en escena. Verla actuar es verla disfrutar y disfrutar nosotros con ella. David Ordinas tiene energía y brilla cada vez que sale al escenario. Sabe a poco. Al igual que Jacinto Bobo, divertidísimo y sorprendente en su papel de amante de la literatura, y Fran García, que aporta mucha naturalidad a la escena. Los cuatro se compaginan y divierten al espectador, con el que juegan y al que logran integrar sin que nos demos cuenta, incluso hasta hacerle confesar sus travesuras más ocultas.
Comedia Multimedia logra despertar al espectador de su letargo cibernauta. Y lo hace con teatro del bueno. Calidad en escena, compromiso y buenas voces. Todo ello sin necesidad de grandes aspavientos, con un cuidado repertorio musical y un vestuario a medida (todo menos la camiseta de Bobo que la marca en el cuello despista a los más quisquillosos). Tendremos Comedia Multimedia para rato. O eso esperamos.